República Dominicana-A medida que pasan los días se intensifica el drama humano de la cárcel de La Victoria, recrudecido por el incendio registrado el lunes y que a la fecha ha dejado un saldo de 13 reclusos muertos, 9 de ellos aún sin identificar.
4 días han transcurrido desde que un voraz incendio destruyera por completo 5 áreas de la Penitenciaría de La Victoria, dejando al desnudo una vez más la deshumanización del sistema penitenciario en República Dominicana.
Desde entonces, han persistido las quejas por la desinformación y un supuesto maltrato a los reclusos, confirmado este viernes por un grupo mientras era trasladado hacia otro recinto carcelario.
Desde el interior del camión que los transportaba retumban las voces que, con impotencia repetían que no se les ha brindado comida, contradiciendo la información ofrecida por la directora del Penal, María Isabel Gil.
Mientras, siguen llegando familiares desesperados, que todavía desconocen si sus parientes están vivos o muertos. Aunque ya con la tranquilidad que le da saber, que sus seres queridos resultaron ilesos del siniestro, también se quejan aquellos a los que no le dejan pasar la comida y medicamento que llevan a los privados de libertad.
Este viernes, otra comisión de los Derechos Humanos visitó la Cárcel de La Victoria. Sin embargo, a juzgar por las informaciones que ha recibido de los propios presos, descarta la posibilidad de que la cifra de muertos pueda subir mucho, en relación al número dado a conocer por las autoridades.
Virgilio Almánzar explicó que algunos de los reclusos murieron quemados porque después de haber salido de las áreas en llamas se devolvieron a robar.
En carpas instaladas en la explana frontal del recinto carcelario, la Procuraduría General de la República continúa asistiendo a familiares de los internos que siguen llegando con la finalidad de conocer el paradero o estado de salud de sus parientes. En tanto, que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses identificó solo como Chichí, a otro de los fallecidos, quien llevaba 16 años preso por homicidio.