EFE.- NUEVA DELHI.- Las autoridades de la India elevaron a 27 la cifra de muertos, varios de ellos niños, tras un incendio ocurrido ayer en un complejo de juegos infantiles en el oeste de la India, informaron este domingo fuentes oficiales que continúan investigando las causas del siniestro.
«Se han recuperado 27 cuerpos y también se han encontrado algunos restos (humanos), por lo que creemos que el número de muertos será de alrededor de 28», dijo en una declaración a los medios el comisionado de policía local Raju Bhargava.
Los medios indios cifran en más de 30 el número de víctimas, citando fuentes sanitarias y reportes de personas desaparecidas que se supone se encontraban en el complejo de juegos y todavía no han sido halladas.
La tragedia tuvo lugar en TRP Game Zone, un complejo de entretenimiento en la ciudad de Rajkot, del estado de Gujarat, con múltiples áreas de juegos, pistas de coche y trampolines, principalmente para niños y jóvenes.
Las investigaciones preliminares después de inspeccionar el sitio sugieren que el incendio podría haber comenzado debido a trabajos de soldadura en una construcción adyacente, en el mismo complejo.
«Allí había mucho material inflamable, que se incendió muy rápidamente y se extendió por toda la zona de juego», aseguró Bhargava.
Los propietarios de las instalaciones fueron trasladados a la comisaría para ser interrogados, según la Policía, que de momento desconoce la causa del incendio.
La zona de juego, un cobertizo metálico de dos pisos de láminas de hojalata, no tenía certificado de funcionamiento (NOC) del departamento de bomberos municipal, según fuentes oficiales.
Pocas horas después de esta tragedia, una explosión en un hospital infantil de Nueva Delhi causó la muerte de al menos siete recién nacidos y dejó heridos y con graves quemaduras a otros cinco bebés, presuntamente por el almacenamiento y distribución ilegal de oxígeno.
El cuerpo de bomberos de Delhi y medios reportaron otros tres muertos en otro incendio.
Los tres sucesos, aunque aislados, atraen atención sobre las fallas de seguridad en infraestructuras públicas, muchas de ellas que operan sin permiso o medidas de emergencia, y la responsabilidad social de los propietarios.