República Dominicana.-El reconocido dirigente político, Luis Ynchausti, aseguró este jueves que si en la próxima reforma fiscal, anunciada por el Presidente de la República, Luis Abinader, no se hace un equilibrio económico en beneficie de los sectores más vulnerables del país y en cambio se toman medidas que limite la capacidad de compra de la población, podría producirse un estallido social de proporciones inigualables.
“A la hora de realizar la reforma fiscal, Abinader debe tomar en cuenta a los sectores más pobres de la sociedad, tomando medidas que no contribuyan a aumentar los precios de la canasta alimenticia del pueblo”, apuntó.
Ynchausti comentó que sin haberse producido la reforma ya los productos de primera necesidad han aumentado de forma alarmante.
“En este país a una persona que gane 26 mil pesos, se le hace imposible obtener la canasta familiar, porque esta anda por los 45 mil pesos y para lograrlo le faltarían 19 mil pesos para poder alimentarse medianamente”, destacó.
Sugirió al presidente Abinader pensar bien a la hora de tomar medidas económicas que afecten a la mayoría del país, porque si no se toman acciones correctas, en la nación correría mucha sangre y eso no lo deseamos.
“En la reforma que viene Abinader tiene que tratar de proteger a la población más pobre, para evitar que la gente salga a las calles a protestar por lo que sea y como sea”, manifestó Ynchausti.
Precisó que es necesario que el gobierno aplique una serie de medidas económicas que reduzcan los altos e inalcanzables precios de los productos de consumo diario, a fin de que los pobres puedan tener acceso a estos.
Indicó que si en vez de hacer una reforma que favorezca a la mayoría se hace para beneficiar a una minoría que posee los recursos y los medios de producción, se estaría alimentando el surgimiento de un levantamiento de carácter social que haría colapsar el orden institucional. “Eso no es lo que queremos”, ratificó.
Puntualizó que está consciente de la necesidad que tiene el gobierno de realizar una reforma fiscal para poder cumplir con los compromisos contraídos, pero el presidente no puede perjudicar con esto a los de abajo.
Agregó que si el gobierno finalmente hace la reforma tiene también que crear planes de emergencia social y económica para garantizar que desde las instituciones del Estado haya facilidades que hagan más llevadera la vida de los sectores más necesitados.
Dijo esperar que con la reforma fiscal no salgan perjudicados los que no tienen nada, ya que si esto acontece de esa manera se multiplicarían a nivel nacional los actos delincuenciales, atracos, robos y crímenes, entre otros.
“Con estas declaraciones lo que quiero es evitar que se produzca en el país un estallido social que haga colapsar la institucionalidad democrática del país, por el descontrol de la situación”, ponderó.