CARACAS (EFE).- El Gobierno de Venezuela anunció este lunes que se reservará el derecho de tomar acciones legales para “reparar” el daño causado por la confiscación del avión oficial del presidente Nicolás Maduro.
El avión fue tomado en República Dominicana por orden de las autoridades de Estados Unidos, en el marco de las sanciones aplicadas a Caracas.
Venezuela “se reserva el derecho de emprender cualquier acción legal para reparar este daño a la nación, así como todos los otros daños causados por la política criminal” de EE.UU., señaló el Ejecutivo de Maduro en un comunicado, en el que tildaron la confiscación de “piratería”.
Según Washington, la aeronave, que fue transferida a Florida por haber sido “comprada ilegalmente” por 13 millones de dólares, es un Dassault Falcon 900EX propiedad de Maduro y de personas afiliadas a él en Venezuela, que era operada en su nombre.