ESTADOS UNIDOS (NBAMANIACS.com).-Khris Middleton está ante un año de reivindicación. Tras un par de cursos en los que no se le ha visto a su mejor nivel, el alero de Milwaukee Bucks quiere demostrar que aún es una estrella de la NBA y que está capacitado para rendir de manera constante a gran nivel. Por ello, quiere dejar atrás los problemas físicos que le han hecho perderse hasta 76 partidos en las dos anteriores campañas –este verano se ha operado ambos tobillos– para hacer de los de Wisconsin un verdadero candidato al título.
«Tener una temporada exitosa es jugar casi 82 partidos. Entendiendo que puede haber un par de partidos en los que no puedas jugar porque te dieron un rodillazo en el muslo o algo así como un esguince de tobillo grave, pero por ese tipo de cosas te pierdes uno o dos partidos. Cualquier cosa por debajo de 70 o 75 partidos, no considero que sea una buena temporada para mí», comenta a Eric Nehm de The Athletic.
La realidad es que en los últimos tiempos Middleton se ha ganado la etiqueta de jugador propenso a las lesiones, algo que le molesta especialmente al entender que siempre lo pone todo de su parte para estar en forma. Claro que el hecho de que aún no haya jugador en la actual pretemporada, no ayuda.
«Creo que cuando alguien habla de propenso a las lesiones, se refiere a cómo cuidas tu cuerpo. Me enorgullezco de cuidar mi cuerpo desde el primer día que llegué a la NBA. Así que… no, no creo que sea propenso a las lesiones en absoluto. Simplemente he tenido incidentes desafortunados que han sucedido en una cancha de baloncesto, lo cual es sin duda el lugar equivocado», expresa.
Respecto a las opciones del equipo en la campaña 2024-25 que está a punto de comenzar, no puede estar más en desacuerdo con la encuesta realizada por los general manager de la Liga, la cual les sitúa en la quinte plaza de la Conferencia Este.
«Realmente me importa una mierda. No tiene sentido para mí. No necesito motivación de fuentes externas ni de lo que sea. Viene de dentro. Viene de querer ser el mejor jugador o el mejor equipo. Así que esas cosas, las expectativas que haya, realmente no me molestan. La única expectativa que importa es la que hay dentro de nuestro vestuario», sentencia.
Aunque lleva años siendo élite de la NBA, Middleton tiene claro a sus 33 años que el éxito no está en sus estadísticas ni en los logros personales, sino en conseguir que Milwaukee sea un equipo ganador.
«Para mí, es simple. Simplemente se trata de ser la mejor versión de mí mismo que pueda ser. Si eso significa que estoy anotando 10 puntos y estamos ganando todos los partidos, será un gran año para mí. Lo que sea necesario para ganar. Aprendí al principio de mi carrera que, si ganamos, todo se arregla solo», concluye.