SANTO DOMINGO, RD.- La onda tropical número 46, que ha afectado a la República Dominicana en las últimas 24 horas, comienza a alejarse del país este martes. Sin embargo, sus remanentes seguirán influyendo en el clima dominicano al combinarse con los efectos de una vaguada y el calor caribeño, lo que provocará períodos de lluvias en varias regiones del territorio.
El fenómeno ha dejado lluvias dispersas y tormentas, especialmente en las zonas este, norte y cordillera Central.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos sigue monitoreando el área de baja presión, identificado como AL94, que se encuentra en el Atlántico tropical. Aunque actualmente se encuentra en un entorno de aire seco que limita su desarrollo, los meteorólogos advierten que, a medida que se desplace hacia el oeste, las condiciones podrían volverse más favorables para su fortalecimiento.
Se estima que, hacia mediados o finales de la semana, el sistema podría acercarse a las islas de Sotavento con el potencial de convertirse en una depresión tropical si las condiciones lo permiten.
El NHC ha estimado una probabilidad de desarrollo de 10% en las próximas 48 horas, pero se espera que esa cifra aumente al 60% en los próximos siete días, lo que mantiene en alerta a las autoridades de la región del Caribe.
Se recomienda a la población estar atenta a las condiciones meteorológicas y a los boletines oficiales, mientras las autoridades locales continúan el monitoreo de ambos fenómenos, la onda tropical y el sistema de baja presión en el Atlántico.
Por otro lado, se espera que, a lo largo del día, las precipitaciones se mantengan intermitentes, aumentando la posibilidad de aguaceros aislados en la tarde debido a la interacción con la vaguada, un sistema de baja presión en los niveles altos de la troposfera.
A pesar de que la onda tropical se desplaza hacia el oeste, los efectos combinados con el calor y la humedad característica del Caribe podrían generar precipitaciones en localidades como Santiago, La Vega, el Gran Santo Domingo y la zona costera, con posibilidad de tormentas eléctricas y ráfagas de viento.