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República Dominicana.-Cuando se pasa balance a los acontecimientos registrados en el año que concluye, no se puede excluir la desaparición física de las personalidades del mundo de la política, las artes, la ciencia y el deporte, que durante el 2024 partieron de éste mundo a la eternidad.
Cada uno de ellos, además de dejar momentos de tristeza, también dejaron un legado en sus respectivas disciplinas, un legado para la posteridad, a ser juzgado por la historia que se construye de generación en generación.
Es así como iniciando enero, justo el día primero, murió el presidente “ad vitam” de la Pasteurizadora Rica, Julio Brache Arzeno. El empresario también formaba parte de los consejos administrativos de Consorcios Cítricos Dominicanos y Lechería San Antonio.
Finalizando enero, el arte dominicano tiene su primera gran pérdida con la muerte del actor y humorista Víctor Pinales, quien sufrió un paro respiratorio a los 59 años, mientras estaba interno por neumonía en la Plaza de la Salud. También en enero murió a causa de un tumor cerebral, Norma Deyanira, una de las vocalistas más reconocidas de la banda «Las Chicas del Can» y, Anita Ontiveros, una pionera de la televisión dominicana y primera directora, productora y camarógrafa del país, murió también en enero.
En el 2024, el mundo del arte también vio partir a la comediante Luciola Echavaría, tras sufrir una crisis diabética que no pudo superar. En octubre murió el reconocido merenguero dominicano Raffy Matías.
En Medellín, Colombia, murió a los 81 años, el baladista venezolano Rudy Marquez, interprete de la popular canción “Mis Años Con ella”.
Renata Flores, La villana de las telenovelas, recordada por su actuación en Rosa Salvaje, Rebelde, La usurpadora y Carita de ángel, falleció en febrero a los 74 años, y en noviembre Silvia Pinal, la última diva del cine de oro mexicano', falleció tras pasar varios días en un hospital a causa de una infección que se extendió hasta sus pulmones.
Quincy Jones, uno de los gigantes de la música y la cultura popular, productor del emblemático álbum Thriller, de Michael Jackson, y Ganador de 28 premios Grammy, murió a los 91 años.
Ron Ely, recordado por su papel en la serie 'Tarzán', falleció a los 86 años, y Bernard Hill, conocido por sus papeles en El señor de los anillos y El Titanic, murió a los 79.
Del ambiente político local fallecieron en el año que termina el ex rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Franklin Almeyda Rancier, ex miembro del Comité Político del PLD y a la hora de su muerte alto dirigente de la Fuerza del Pueblo. También murió el exdiputado Manuel Díaz, quien fue representante de San Cristóbal en la Cámara Baja por el Partido de la Liberación Dominicana.
A los 88 años murió el profesor, ex ministro de Deportes y combatiente de la guerra de Abril, Jesús de la Rosa; y en Chile se fue de éste mundo el ex presidente de ese país, Sebastián Piñera, quien murió durante un accidente de helicóptero, en la región Los Ríos.
En el 2024, la clase periodística también vivió días de luto, con la muerte a los 78 años, el 20 de febrero, del ex presidente del Colegio Dominicano de Periodistas, profesor Adriano de la Cruz. Balbueno Medina, veterano periodista, falleció en agosto y en noviembre, la periodista, presentadora de televisión y socióloga Juana Núñez.
Tras un largo tiempo batallando con problemas de salud, también murió la periodista Marcia Facundo, primera mujer miembro de la Asociación de Cronistas Deportivos.
La locución dominicana perdió en el año que concluye al ilustre comunicador Wilfredo Alemany, quien murió a los 75 años, afectado por problemas de salud, y casi finalizando el 2024 muere en un accidente de tránsito José Miguel Román, conocido como "El Cafre", un popular locutor de Santiago.
El 22 de agosto murió a los 69 años el periodista José Jaquez, autor de la célebre columna Ají Tití, quien también cultivó con éxito el humor y la literatura, incursionando además en la actuación y producción de espacios de Televisión.
El 16 de octubre se despidió de éste mundo el periodista y ensayista Federico Henríquez Grateraux, autor de las obras Feria de las Ideas y Disparatario, entre otras.
Una de las disciplinas deportivas más enlutadas durante el 2024 fue el Béisbol, que el 25 de febrero perdió, a los 63 años, al lanzador vegano José de León; y el 18 de junio muere a los 93 años el más grande jardinero central de las grandes ligas, Willie Mays.
Diez días después falleció a los 86 años el compañero de Willie Mays en los Gigantes de San Francisco, Peruchín Cepeda, ambos miembros del Salón de la Fama del Béisbol de las Grandes Ligas.
El 29 de septiembre murió a los 92 años en su natal Monte Cristi el ex pelotero Osvaldo Virgil, conocido como “El Orégano”, primer dominicano en debutar en el béisbol de las grandes ligas, el 23 de septiembre de 1956, con los gigantes de Nueva York, hoy gigantes de San Francisco.
Al día siguiente, muere a los 83 años el ex pelotero Pete Rose, dueño del record de hits de todos los tiempos con 4 mil 256, ganador de tres series mundiales, un premio de jugador más valioso de la Liga Nacional y elegido a 17 juegos de estrellas. Murió fuera del salón de la fama de Cooperstown y excomulgado del béisbol por apostar a la pelota siendo dirigente de los Rojos de Cincinnati.
También a los 83 años murió, el 8 de octubre, el lanzador cubano Luis Tiant, ganador de dos títulos de efectividad y participación en tres juegos de estrellas.
Y, el 23 de noviembre murió a los 85 años, en un hospital de Atlanta, ciudad donde sobresalió con los Bravos como compañero de Hank Aaron, el dominicano Ricardo Carty, uno de los grandes bateadores criollos de las décadas 60 y 70.
Este pasado 20 de diciembre prendió vuelo hacia el cielo, el miembro del Salón de la Fama y líder en bases robadas en la historia de las Grandes Ligas, Rickey Henderson, de 65 años.
En abril, murió de cáncer a los 76 años en Las Vegas – Nevada, la ex súper estrella del futbol americano O. J. Simpson, cuyo legado se vio manchado con el asesinato de su esposa Nicole Brown y su amigo Ronald Goldman, en junio de 1994, enfrentando lo que se denominó como el Juicio del Siglo, donde fue declarado inocente por un jurado en 1995, y culpable dos años más tarde en un juicio civil, en el que fue condenado al pago de 33 millones y medio de dólares a favor de los parientes de las víctimas.
Los amantes del Baloncesto vieron partir el 5 de agosto al dominicano Soterio Ramírez, ex miembro de la selección nacional de baloncesto.
Ya el 12 de junio había fallecido a los 86 años uno de los grandes de la historia de la NBA, Jerry West, y el 30 de septiembre murió de cáncer cerebral, a los 58 años, Dikembe Mutombo, miembro del salón de la fama de la NBA y uno de los mejores defensores de la liga. El congolés dominaba 9 idiomas.
El sector empresarial dominicano perdió en marzo, a los 90 años, el reconocido José León Asensio, ex presidente del Grupo E. León Jimenes y la Cervecería Nacional Dominicana, y en septiembre murió a los 80 años el próspero empresario José Manuel Paliza, ex presidente de la Asociación de Industrias de la República Dominicana.
En mayo la Iglesia Católica se quedó sin el obispo emérito de Bani, Príamo Tejada, quien murió a los 90 años; y el 23 de junio un infarto termina con la existencia del dirigente choferil Alfredo Pulinario, mejor conocido como Cambita, en el ambiente sindical.
Y, cuando se contaban 48 horas para despedir el 2024, trasciende la muerte del expresidente de Estados Unidos Jimmy Carter (1977 – 1981), a los 100 años.
Carter entró en la historia de Estados Unidos con su improbable ascenso de cult de magnate del maní (cacahuete) a presidente del país, pero su mayor legado fue redefinir la vida después de la Casa Blanca, con una labor tenaz que dejó una huella sin precedentes en la política estadounidense y mundial.
Carter murió tras librar una batalla durante años contra la misma enfermedad que derrotó a su padre y sus tres hermanos: un melanoma que se había extendido al hígado y al cerebro.
Murió la tarde del domingo 29, en su casa de Plains, Georgia, informaron The Washington Post y Atlanta Journal-Constitution, citando a su hijo Chip, después de permanecer casi dos años en cuidados paliativos.
Descanso eterno…
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