SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Con la decisión del Gobierno dominicano de no firmar el pacto migratorio y de refugiados, el país pierde la oportunidad de exigir a los organismos internacionales y demandar de Haití, una mayor institucionalidad en el manejo de la documentación de sus emigrantes, entre otros puntos.
Así lo considera el historiador Wilfredo Lozano, quien cree que en la decisión primó el nacionalismo irracional.
Para el historiador, la postura del Gobierno frente a la firma del pacto migratorio, ni del Pacto Global sobre Refugiados, evidencia la necesidad de que en la República Dominicana de se produzca una gran reforma democrática que comience por una cultura de tolerancia con la población.
Lozano ve como lamentable la decisión del país de no formar parte de la firma de estos convenios; como él, la también historiadora Ana Feliz, entiende que estos acuerdos son mecanismos que dan pasos de avance en la protección del derecho de todas las personas.
El canciller Miguel Vargas Maldonado comunicó esta semana la decisión del Gobierno de no participar de la firma del Pacto Global sobre los Refugiados, que se conoció el pasado lunes durante la Sesión Plenaria de la 73ª Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York.
Previo a que las autoridades dietan a conocer la posición oficial en torno a la firma esos acuerdos, actores de los diferentes sectores de la sociedad advirtieron que estos atentaban contra la soberanía nacional.