Usuarios del Metro de Santo Domingo deploran las vicisitudes por las que atraviesan para poder abordar a tiempo ese medio de transporte debido al toque de queda que inicia a las siete de la noche de lunes viernes.
La fila se hace interminable en las paradas del Metro de Santo Domingo próximo a las seis de la tarde, ya que a esa hora sale el último viaje, desde que fue impuesto el toque de queda por la pandemia del Covid-19.
En la parada Ulises Francisco Espaillat de la Línea 2 del Metro de Santo Domingo, ubicada en la intersección de las avenidas John F. Kennedy con Winston Churchill, los usuarios se quejan por la larga fila que tiene que hacer cada tarde.
Dicen que esta situación les ha cambiado la vida.
En medio de la angustia algunos pasajeros hacen sugerencias para que se le busque solución a lo que definen como un calvario, por lo que plantean que los empresarios despachen a los empleados en horarios escalonados.
La razón por la que se impuso el toque de queda, fue para evitar la acumulación de personas, pero de acuerdo a estos usuarios del Metro, en esas circunstancias es difícil que ellos puedan ir a distancia.
Los usuarios del Metro entrevistados coincidieron en que la acumulación se también se produce en otros medios de transporte, como minibuses, microbuses y carros de concho.