EE.UU-Entre bocinazos y vítores, una multitud acudió el sábado al centro de Washington, cerca de la Casa Blanca, para celebrar después de que medios declararon a Joe Biden presidente de Estados Unidos, constataron periodistas de AFP.
El exvicepresidente de Barack Obama, de 77 años, fue elegido presidente número 46 de Estados Unidos, según las proyecciones de las grandes cadenas estadounidenses, poniendo fin al tumultuoso mandato del republicano Donald Trump
Lejos de ese clima de algarabía, el mandatario saliente decidió pasar la tarde jugando al golf en la vecina Virginia tras tuitear afirmaciones incendiarias y sin fundamento sobre presuntos fraudes electorales, antes de regresar a la Casa Blanca.
El entusiasmo en la capital, un bastión demócrata, era enorme, entre ruidos de bocinas de autos, golpeteo de ollas y sartenes y gritos.
"Estoy aquí para celebrar", comentó Jack Nugent, un ingeniero informático de 24 años, mientras caminaba hacia Black Lives Matter Plaza, un área que fue el epicentro de las recientes protestas antirracistas.
"Estoy muy feliz con el resultado. He pasado tantos años esperando que suceda este día".
La Black Lives Matter Plaza es parte de la avenida que conduce a la residencia presidencial y fue así rebautizada meses atrás para denunciar la brutalidad policial contra los afroamericanos.
Los carteles con los rostros de Joe Biden y Kamala Harris, la futura vicepresidenta, florecieron de nuevo en las calles de la capital, donde miles de los seguidores de los candidatos demócratas, todos con barbijo, los exhiben con orgullo.
"Estoy abrumada, extremadamente feliz y muy orgullosa de que hayamos tomado una dirección diferente", dijo Amy Berger, de 40 años, que estaba con su hijo en una zona más residencial.
Cuatro años atrás, en 2016, el clima era absolutamente el opuesto en la ciudad, que había votado masivamente en favor de la demócrata Hillary Clinton, sorpresivamente derrotada por el entonces novato en política Donald Trump.
Muchos que vivieron marginados bajo la gestión del magnate republicano conocieron este sábado un momento de catarsis. En las celebraciones ondeaban banderas de la comunidad LGBT, carteles de las minorías étnicas.
"Soy venezolano, pero vivo aquí desde hace 10 años, así que esto significa mucho para mí", dijo Rafael Contreras, de 28 años.
"Creo que es una esperanza de un futuro mejor para este país, especialmente para los inmigrantes que han estado sintiendo durante los últimos cuatro años que no son bienvenidos y han sido rechazados por este país", agregó.
Escenas similares se vivieron en otras grandes ciudades.
En Nueva York, de donde Trump es oriundo, se replicó la escena de celebración. Catherine Griffin, de 47 años, incluso derramó algunas lágrimas de emoción.
"Estoy feliz de que Donald Trump esté saliendo de nuestras vidas, esperemos para siempre", dijo.
Los estadounidenses esperaron cuatro días antes de conocer el nombre de su futuro presidente tras una elección muy cerrada en un país extremadamente polarizado. Los medios terminaron proyectando el sábado una victoria de Joe Biden.