En la Nueva Barquita viven entre quejas contra delincuencia y puntos de drogas

SANTO DOMINGO.-Entre las quejas por la falta de empleos, la delincuencia, los puntos de droga, el desorden y otros males, viven los residentes en La Nueva Barquita de Santo Domingo Norte, desde que fueron sacados, por la gestión del expresidente Danilo Medina, de la orilla de las nauseabundas aguas del río Ozama, en el sector Los Mina.

Aunque cuentan con un techo seguro, lejos del contaminado río Ozama, que los inundaba con la más mínima lluvia, los residentes en La Nueva Barquita, en el municipio Santo Domingo Norte, aseguran que su calidad de vida ha bajado, ya que no tienen facilidades de empleos y dicen que no cuentan ni siquiera con los ministerios pesos que deben pagar por el mantenimiento.

Y al mudarse de barrio, también se llevaron con ellos los problemas sociales que desde siempre han arrastrado, como la venta de drogas, la delincuencia, el desorden y los pleitos callejeros, que no les permiten tener sosiego. Mientras que tener que sacar un permiso con el patronato que administra el complejo habitacional para llevar al lugar algún inmueble, les hace sentirse prisioneros en su propia casa.

Los que tienen negocios se quejan, de que pasaron de tener locales propios a tener que pagar alquiler, además de las trabas que dicen enfrentan para poder adquirir un local, pese a que muchos están vacíos.

Y mientras los residentes en La Nueva Barquita se quejan, los que aún permanecen en La Ciénaga, Los Guandules y otros barrios levantados a orillas del río Ozama, muestran la otra cara de la realidad y piden a gritos ser reubicados.

El proyecto La Nueva Barquita inició en el 2016, durante la gestión del entonces presiente Danilo Medina, en beneficio de más de 1, 500 familias en condiciones riesgo, debido a su cercanía con el río Ozama.