Lo que comenzó como un simple rumor ha ido tomado forma y color en Congreso Nacional, que ya designó una comisión para investigar la denuncia de supuesto acoso sexual, en una Cámara de Cuentas que ha estado envuelta en los escándalos desde que sus miembros fueron designados.
La denuncia, ya es tema de conversación entre ciudadanos comunes que dicen no sorprenderse de que ese tipo de cosas pasen en instituciones gubernamentales.
El clamor de que se investigue la denuncia de acoso laboral y sexual hacia las féminas que integran el Pleno de la Cámara de Cuentas, de parte del presidente de ese organismo, Janer Andrés Ramírez, ya no solo se limita a legisladores y miembros de la sociedad civil.
Ciudadanos de diferentes sectores de la capital también piden llegar a la verdad, señalando que este tipo de casos es más común del que se piensa en instituciones del Estado, pero que no se hacen públicos por temor de parte de las víctimas.
Los consultados por este medio entienden que se deben producir grandes cambios en el organismo llamado a fiscalizar los recursos del Estado, asegurando que cada gestión es un sello gomigrafo del Gobierno de turno y que esta no es la excepción.
Para sustentar el más reciente escándalo de la Cámara de Cuentas, integrada además por Elsa María Catano, Tomasina Tolentino, Mario Fernández Burgos y Elsa Peña, se destapa públicamente una carta de dos empleadas, dirigida a una de las miembro del pleno, clamando por auxilio ante lo que definen acoso laboral y sexual por parte del presidente del organismo, Janel Ramírez.