República Dominicana.-La Oficina de Atención Permanente de San Pedro de Macorís dictó un año de prisión preventiva como medida de coerción a Radhamés Antonio Ramírez, supuesto cabecilla de la banda que sepultó en una fosa a varios choferes, luego de despojarlos de los camiones y autobuses que conducían.
Mientras, los jueces aplazaron para el próximo martes el conocimiento de medida de coerción a demás implicados en el hecho que ha consternado a la sociedad.
Pasadas las cinco de la tarde de este martes, los cuatro apresados fueron conducidos por un amplio contingente policial, desde la dotación de San Pedro de Macorís, hasta el Palacio de Justicia de la comunidad, donde le fue conocida la coerción a Ramírez.
En las afueras del tribunal, decenas de comunitarios permanecían agrupados, pidiendo que se haga justicia por el horrendo crimen contra padres de familia que se dedicaban a cargar mercancías en camiones desde y hacia Santo Domingo.
Los petromacorisanos portaban pancartas en las que se pedía que a los señalados como responsables de los raptos se aplique todo el peso de la ley.
Otros de los detenidos y señalados como miembros de la banda son Hansel Peralta Mercedes, de 29 años, y Radhamés Antonio Ramírez, de 44. Éste último fue la persona que condujo a las autoridades hacia la casa abandonada, en cuyo patio estaba la fosa donde los choferes eran lanzados vivos, atados y con una funda en la cabeza.
Consternación
Luego de que se confirmara que los restos de tres hombres encontrados dentro de una fosa en el patio de una casa abandonada, en la zona de Guavaberry, en la autovía del Este, pertenecían a tres choferes de esa provincia que habían sido reportados como desaparecidos, la indignación se apoderó de los parientes y allegados.
Los cuerpos de los tres transportistas, que habían sido reportados como
desaparecidos hace varias semanas, son los de Gary Wilson Rodríguez Castro, de 45 años, conductor de la ruta Hato Mayor-Sabana de la Mar; Germán Arredondo, chofer de mudanzas y acarreo, y David Polanco, chofer de la ruta B de la ciudad.
De estos, solo el cuerpo de Germán Arredondo pudo ser recuperado completo, aunque en avanzado estado de descomposición, y los de los demás solo se obtuvieron osamentas y restos descompuestos, así como algunas pertenencias.
El descubrimiento de los cadáveres se produjo luego de que fuera apresada la exsargento de la Policía Nacional Luz Divina Martínez Pimentel, de 32 años, quien es la esposa de Hugo Antonio Zorrilla Alfonseca, señalado como uno de los cabecillas de una banda de delincuentes dedicada al rapto y asesinato de transportistas de la región Este.
Luego, estos se apropiaban de los vehículos de sus víctimas, y los trasladaban hacia Elías Piña, para introducirlos como contrabando en Haití por otros hombres aun prófugos, y que han sido identificados como Divanis Adames Lorenzo y un nacional haitiano solo conocido con el apodo de “Yan”.
Luego de haber sepultado a Germán Arredondo, sus familiares dijeron que no descansarán hasta que los miembros de la banda criminal sean condenados y de esa forma evitar que sigan quitándole la vida a personas de bien.
Miguel Arredondo Quezada, hermano de una de las víctimas, dijo que Hugo Antonio Zorrilla Alfonseca, quien es hijo de un coronel de la Policía Nacional asignado a la Autoridad Metropolitana de Transporte (Amet), tenía menos de 20 días que había salido de la cárcel por un hecho delictivo, cuando el primero de mayo en curso se reportó la desaparición del chofer David Polanco y más adelante, el día 12 del mismo mes, desapareció Germán Arredondo.
“Si a ese criminal no lo hubieran dejado libre, posiblemente hoy no estuviéramos lamentando esta horrenda tragedia”, manifestó Miguel Arredondo.