Diferentes organizaciones del país europeo instaron a los aficionados a evitar atuendos que pueden ofender a la sociedad catarí y a otras naciones de Medio Oriente.
Doha.– Los hinchas ingleses que se visten en Catar con trajes de cruzados cristianos han generado indignación en la sociedad del país anfitrión del Mundial 2022, debido a la historia de "masacre y ocupación" de tierras árabes que implicaron las Cruzadas en la Edad Media.
Los atuendos de caballeros templarios y cruzados cristianos son habituales en las graderías de los estadios europeos cuando juega la selección de Inglaterra, pero este tipo de disfraces puede ser controvertido en una nación musulmana, reconoce Daily Mail.
En las redes sociales circulan imágenes de aficionados ingleses en Catar, vestidos con atuendos 'medievales' marcados con la cruz de San Jorge, cascos y cotas de malla, e incluso algunos portan espadas y escudos de gomaespuma. La prensa británica informa que las fuerzas del orden cataríes han impedido a esos hinchas el ingreso a los estadios.
Mientras los 'cruzados' ingleses protestan por el trato recibido por parte de las autoridades del país anfitrión del Mundial, organizaciones británicas contra el racismo, como Kick It Out, les han sugerido evitar disfraces que representen a los caballeros templarios o cruzados, recordándoles que pueden ser ofensivos en Catar y otras naciones de la región.
En las redes sociales, también muchos internautas han criticado a los hinchas de Inglaterra vestidos de cruzados, cuya actitud califican como la "cúspide de la arrogancia occidental". "Esto es muy ofensivo, ya que las cruzadas son responsables de la violación, masacre y ocupación de tierras árabes", escribió un usuario de Twitter.
"Ir al Medio Oriente disfrazado como un cruzado no hará que te den la bienvenida que crees que mereces", comentó otro internauta. Mientras que la Asociación de Aficionados al Fútbol de Inglaterra instó a sus connacionales a respetar a los anfitriones, aunque matizó los hechos y consideró que se trataría de "ingenuidad" y desconocimiento de "las implicaciones [histórico-religiosas] de lo que llevan puesto".
Las Cruzadas tuvieron lugar entre 1095 y 1291, cuando las más poderosas naciones europeas emprendieron expediciones religioso-militares para someter a los musulmanes Jerusalén con el pretexto de recuperar lo que consideraban 'Tierras Santas'.