SANTO DOMINGO.– El italo-colombiano Michael Saba, acusado de matar y desmembrar a la venezolana Jenny Carolina Pérez Canelón en Piantini, denunció haber sido torturado durante su detención, según alegan sus abogados.
La solicitud de aplazamiento presentada por la defensa fue aceptada por el Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional, permitiendo que Saba fuera evaluado por un médico legista.
Al salir del tribunal, Michael Saba mantuvo silencio ante las preguntas de los periodistas que cubren el caso. Por su parte, la hermana de la víctima, Yeisy Carolina Quinto Canelón, no hizo comentarios sobre el crimen.
La defensa técnica de Saba afirmó que su cliente fue golpeado durante los interrogatorios y reiteró que este nunca ha confesado ser el autor del crimen, contradiciendo la versión de la Policía.
Hasta el momento, no se ha revelado el vínculo entre Saba, de 30 años, y la joven de 27 años, Jenny Carolina Pérez Canelón. Durante la detención, se le incautó una pistola Glock 9 milímetros con su cargador y un silenciador, así como tres cuchillos encontrados en el lugar del crimen.
La próxima comparecencia de Michael Saba ante el Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional está programada para el miércoles 27 de diciembre a las nueve de la mañana, donde se discutirá la medida cautelar que se le impondrá.