SANTO DOMINGO.- En Buenos Aires de Herrera, la desesperación se apodera de los residentes, quienes enfrentan una ola de delincuencia que perturba sus vidas diarias y afecta a aquellos que se esfuerzan por trabajar y sostener sus negocios en la zona.
Crecencia Margarita Hidalgo, quien se dedica a vender productos cárnicos, señaló que la situación alcanza niveles críticos en el sector, con los delincuentes mostrando un desprecio absoluto por la vida al amenazar a cualquier persona que se interponga en su camino.
Asimismo destacó que en respuesta a la violencia desatada, los afectados se ven forzados a defenderse como pueden, sumidos en un constante estado de alerta y miedo.
La presencia incesante de los criminales, que no respetan horarios, ha convertido los negocios en blanco constante de robos.
Esta dicotomía entre aquellos que eligen trabajar dignamente y aquellos que optan por el camino fácil de la delincuencia ha generado una brecha insalvable en la comunidad.
Sin embargo, la problemática no se detiene ahí. Los residentes también denuncian la proliferación de basura, un mal persistente que agrava la ya precaria calidad de vida en el sector.
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En medio de este caos, los habitantes de Buenos Aires de Herrera levantan sus voces en un llamado urgente a las autoridades. Solicitan acciones concretas y efectivas para abordar la inseguridad y el abandono que asolan la zona, anhelando recuperar la paz y la estabilidad que les ha sido arrebatada.