Santo Domingo – Los ciudadanos siguen con el grito al cielo este ciernes por el alto precio del pollo que una vez fue la carne más económica y accesible en la mesa de las familias dominicanas y hoy se ha convertido en un lujo imposible de costear para muchas.
Blanca Gerónimo, quien con dinero en mano se trasladó al mercado de Herrera, dijo que llegará el momento en el que no va a encontrar que comprar.
Las amas de casa han alzado sus voces, por más de un mes advirtiendo que la situación ha llegado a un punto crítico y que los sueldos ya no alcanzan para cubrir los alimentos básicos, y el pollo, un alimento esencial, se ha vuelto casi inalcanzable.
"Nos están dejando sin opciones", es el grito desesperado que se escucha en el mercado. Las madres de familia, que antes podían contar con el pollo como una opción segura para alimentar a sus hijos, ahora temen que llegue el día en que no haya nada que poner en el plato.
A pesar de la crisis, algunas voces irónicas que con sarcasmo insisten en que "todo está barato" y que el presidente Luis Abinader está liderando "el mejor gobierno que ha pasado por el país". Estas afirmaciones, sin embargo, solo añaden más dolor a quienes día tras día ven cómo el costo de la vida se dispara, mientras los salarios permanecen estancados.
En los mercados, el precio del pollo está hasta en 85 pesos la libra, mientras que en los colmados puede alcanzar los 100 pesos. Los comerciantes aseguran que en las granjas el pollo vivo se vende entre 42 y 46 pesos por libra, pero este costo no alivia la presión que sienten las familias cuando deben decidir entre comprar carne o cubrir otras necesidades básicas.
La ciudadanía espera, casi sin esperanza, que las autoridades tomen medidas para regular los precios y devolver el pollo a la mesa de todos los dominicanos. Sin embargo, mientras la crisis persiste, la preocupación crece.