MILWAUKEE (NBAMANIACS.com).-Anoche los Cavaliers ganaron en Milwaukee con un canastón de Donovan Mitchell, pero el verdadero motivo es que en conjunto son bastante mejores que unos Bucks que ni con 75 puntos combinados entre Giannis Antetokounmpo y Damian Lillard fueron capaces de cantar victoria.
Fue un partido más que entretenido. Aunque los de Doc Rivers empezaron mejor y gozaron durante la primera mitad de rentas superiores a la decena de puntos, tal empuje fue controlado por unos Cavs que tuvieron hasta seis jugadores por encima de los 10 puntos. Fue un ejercicio grupal, uno en el que brilló con luz propia un Donovan Mitchell autor de 30 puntos y que nos regaló el gran momento de la noche NBA al lograr la canasta definitiva a solo tres décimas del final.
El jugador franquicia de los de Ohio agarró el balón en la última posesión, por un instante pareció que no tenía salida, pero se recompuso en milésimas para encontrar una increíble suspensión con la que silenció al rival (y a todo el pabellón), poniendo en el electrónico el definitivo 113-114 y colocando a los suyos en la clasificación de la Conferencia Este con un inmaculado 7-0.
Mitchell estuvo excelente, pero en los Cavaliers hubo bastante más. Jarrett Allen firmó un doble-doble de 15 puntos y 12 rebotes, Darius Garland otro de 11 puntos y 10 asistencias; y ya desde el banquillo Sam Merrill aportó 17 tantos e Isaac Okoro 13 puntos y 8 rebotes. Exacto, colaboración no faltó en el equipo dirigido por Kenny Atkinson.
Los Bucks despidieron a mitad de la temporada pasada a Adrian Griffin. El récord de 30-13 que ostentaban entonces les parecía poco y, según los rumores, Giannis Antetokounmpo tampoco estaba contento con él. Pues bien, el cambio en el banquillo por Doc Rivers está saliendo realmente mal. Si el final de la campaña pasada ya dejó dudas, empezar ahora con 2-4 las subraya en rojo.
Es obvio que en Milwaukee fallan más cosas que el entrenador, y es que anoche no les valió con 41 puntos de Lillard y 34 de Antetokounmpo… La plantilla no responde más allá de sus estrellas y necesitan un punto de inflexión casi de inmediato.