ESTADOS UNIDOS (NBAMANIACS.COM).-¿El que tuvo, retuvo? Que va, Kevin Durant es mucho más que eso. A sus 36 años, y habiendo superado una rotura del tendón de Aquiles, la ahora estrella de los Phoenix Suns sigue jugando a un nivel que solo alcanzan los elegidos, a uno que simplemente gana partidos cuando todo parece en contra.
Justo eso es lo que pasó anoche en Arizona. Philadelphia visitaba a los Suns con el esperado debut de Paul George como gran aliciente; sin embargo, el brillo lo terminó poniendo el de siempre, un Durant que se echó el equipo a sus espaldas en el último cuarto para firmar 15 de sus 35 puntos totales en este periodo y levantar una desventaja que llegó a ser de nueve puntos a seis minutos del final.
Durant se vistió de héroe. Mientras sus compañeros eran incapaces de remontar el vuelo, él machacaba el aro de los Sixers sin descanso hasta darles la puntilla a 24 de segundos del final con una penetración marca de la casa. Estuvo imparable, regaló la victoria a los suyos por 118-116 y les colocó con un excelente balance de 6-1 para seguir a la estela de Oklahoma City Thunder.
En Arizona tienen motivos para sonreír. Tras una dura campaña 2023-24, en la presente han encontrado el camino para ser uno de los equipos más en forma de la NBA, y eso que piezas esenciales en el esquema como Devin Booker aún no han arrancado. El escolta anoche estuvo muy desacertado para concluir con un 3 de 18 en tiros de campo para 13 puntos… Estuvo fatal, pero justo por eso están contentos por Arizona. Si logran que todo funcione, sienten que pueden competir ante cualquiera.
No se puede catalogar con otra palabra los primeros minutos de Paul George con la camiseta de Philadelphia. Terminó con 15 puntos, pero por el camino dejó un 4 de 14 en tiros de campo y hasta 6 pérdidas de balón… Si los de Nick Nurse estuvieron en la pelea fue por los 32 puntos de Tyrese Maxey y el esfuerzo de un banquillo que se combinó para aportar 45 puntos. La realidad es que los 76ers están hundido en la Conferencia Este con un balance de 1-5 y se atisba poca solución si Joel Embiid no regresa en breve. El pívot explicó en pretemporada que su único objetivo era llegar sano a playoffs… Pues bien, puede que ni le haga falta.