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Santo Domingo Este. Residentes y lideres comunitarios del sector Los Tres Brazos se congregaron en una manifestación pacífica para exigir al Gobierno soluciones concretas a los problemas que, aseguran, afectan su calidad de vida desde hace años.
Organizados por el Comité de Lucha por la Defensa de Los Tres Brazos, los manifestantes levantaron pancartas y entonaron consignas en reclamo de mejoras en los servicios esenciales como el suministro de agua potable, energía eléctrica y un sistema eficiente de recolección de basura.
Además, uno de los puntos más sensibles de la protesta fue la exigencia de la titulación definitiva de las viviendas, una demanda que, según los comunitarios, ha sido ignorada por las autoridades durante demasiado tiempo.
"Vivimos en la incertidumbre. No tener un título nos impide desarrollarnos con tranquilidad y nos deja en la total vulnerabilidad", expresó Fernando Morillo, presidente del Frente Amplio en Santo Domingo Este.
En ese sentido, el dirigente comunitario Milciades Gerardo calificó la situación como una deuda histórica del Estado con familias que han habitado la zona por generaciones.
Otro aspecto que encendió el clamor popular fue la denuncia sobre las condiciones inadecuadas en que los niños del Liceo Guillermina Uribe reciben clases. De acuerdo con Glory Pérez, docente del centro, la infraestructura y los recursos actuales no garantizan un ambiente digno para la enseñanza.
"Nuestros estudiantes merecen un espacio seguro y apropiado para aprender. Es un derecho, no un favor", afirmó Pérez.
La manifestación también contó con el respaldo de organizaciones defensoras de derechos humanos. Israel Moya Rosario, presidente de la Comisión de los Derechos Humanos, recordó que el derecho a una vivienda digna está consagrado en la Constitución y en tratados internacionales suscritos por el país.
“Estamos firmes. No nos van a cansar. Seguiremos luchando por el reconocimiento de nuestros derechos y la dignidad de nuestras familias”, sentenció.
Los manifestantes aseguraron que esta jornada es solo el inicio de una serie de acciones para presionar a las autoridades y obtener respuestas concretas. Mientras tanto, Los Tres Brazos sigue esperando.
